Txintxortas, el sabor dulce del invierno
Las Txintxortas son el dulce más tradicional del invierno. Desde siempre, el invierno ha estado unido a los sabores propios de la matanza del cerdo en los caseríos y en nuestro catálogo de dulces de la tierra, a una especialidad que seguimos elaborando desde nuestros inicios: la txintxorta o torta de chicharrón. Es un dulce que sabe a “pueblo” y al trabajo en los baserris; se hace ya en pocos obradores.
Esta torta, que se llama también “txantxigorri” en algunas zonas, tiene como protagonista el chicharrón, un suculento bocado que se obtiene a partir de la manteca del cerdo y los trozos de carne recubierta de manteca, una vez que se ha extraído toda la grasa hirviéndolos. Este es un ingrediente protagonista de innumerables sabores caseros en época de matanza, y que se puede comer caliente o frío.
Para hacer las txintxortas se elabora una torta con harina, azúcar, huevos, manteca, canela y los chicharrones, tal y como se hacía tradicionalmente en muchas casas y en panaderías como la de nuestro fundador Esteban Bizkarra, en los años cincuenta. Entonces, el proceso de elaboración comenzaba haciendo los chicharrones después de la matanza del cerdo.
Siguiendo esta tradición, las txintxortas llegan puntualmente cada mes de enero a todos nuestros establecimientos, siguiendo la receta original de la primera generación de panaderos Bizkarra, con la diferencia de que en la actualidad no obtenemos nosotros mismos el chicharrón sino que nos llega ya hecho. Por lo demás, nuestras Txintxortas conservan todo su sabor característico y siguen teniendo la forma y el aspecto habitual, con la irregularidad de la elaboración manual.
Con las inclemencias del invierno, merece la pena probar este dulce de temporada tan especial y disfrutarlo poco a poco en el desayuno, porque además es todo un reconstituyente. Eso sí, para degustar la Txintxorta con todo su sabor y su textura ideal, os recomendamos templarla previamente en el microondas. Son de estos sabores que recuerdan a “antes”.