Bizkarra anima a celebrar el Dia mundial del pan
La celebración del Dia Mundial del Pan se enmarca para Bizkarra entre las diversas iniciativas que se ponen en marcha para extender la cultura del buen pan entre los consumidores, entre estas destacan las catas de pan y las visitas guiadas a los obradores de Bizkarra en Usansolo (Galkao).
De tour por el obrador
Dentro de su apuesta por explicar al consumidor el buen hacer en su oficio, Bizkarra ha tomado la iniciativa de organizar un programa de visitas guiadas a sus obradores. El objetivo en este caso es acercar las formas de elaboración artesanales al público y su diferencia con los procedimientos industriales. Las visitas son gratuitas y están abiertas al público de todas las edades, y se realizan el tercer sábado de cada mes.
En ellas el pan tiene un protagonismo muy especial, y a pesar de que los asistentes no pueden ver en directo el proceso de elaboración, ya que se realiza durante la noche, se les enseña conceptos claves para conocer la calidad del pan, como la tradicional técnica de la masa madre que usa Bizkarra, con la que se elabora el pan con un trocito de masa guardada de la jornada anterior para que el resultado sea mucho más natural y duradero, evitando el uso de levaduras fermentadas y congeladas. También se habla sobre las diferencias entra la masa fresca y la congelada o pre codida, o sencillamente, cómo reconocer un buen pan sólo con verlo.
Catas para cultivar el paladar
De manera complementaria, Bizkarra realiza ocasionalmente en su establecimiento del Casco Viejo catas de pan. La actividad pretende señalar cómo apreciar las características del buen pan, color, textura, sabor, duración, así como a diferenciar algunos tipos de pan, conocer sus propiedades y su maridaje con otros sabores. Una puerta a todo un mundo gastronómico donde los asistentes pueden rememorar o descubrir las diferentes sutilezas que albergan diferentes tipos de pan a través de sus 5 sentidos. En ella se aprende a identificar a la vista los colores del pan, siempre recomendables los de tonos dorados u ocres que marcarán el tipo de cereal y el método de elaboración empleado, a observar la consistencia de la miga y si es ligeramente alveolada. También se aprende a reconocer al oído el chasquido de la corteza crujiente y al tacto la firmeza del pan. Finalmente se emplea el olfato para intentar descubrir los ingredientes de cada pan, y el gusto al paladar mediante la combinación de los diferentes panes con el aceite de oliva como potenciador del sabor.
En un contexto generalizado de descenso del consumo del pan, Eduardo Bizkarra, al frente de la marca, señala que es “importante recordar todos los valores que tiene el pan en nuestra alimentación, así como recuperar la cultura gastronómica alrededor del pan, y en general el gusto por el buen pan.”